En
nuestra práctica nos interesa pensar en aquellas metodologías que
pongan el acento en la construcción del caso, en la persona, y en
los interrogantes de los profesionales.
“Interrogantes”
que surgen en el día a día de nuestras prácticas profesionales,
donde habitualmente nos encontramos con un exceso de
protocolarización y gestión de los expedientes, quedando relegado a
un segundo plano la atención a la persona, como el objeto
principal de nuestra disciplina.
Nos
interesa, por tanto, profundizar en las nociones del acompañamiento
social, la perspectiva relacional, la construcción de casos y la
perspectiva comunitaria, entre otras.
En
consecuencia, son metodologías como la “problematización” de
Paulo Freire, la “construcción del caso” (José
Ramón Ubieto) o el “método del incidente crítico”
elaborado por la Universidad de Monterrey (México), aquellas
que nos permiten centrar de nuevo la atención en el ámbito de la
práctica relacional, teniendo en cuenta la particularidad de las
personas que atendemos, su universo simbólico y su constitución
subjetiva.
Estas
metodologías parten de algún “dilema”, “incidente” o
“problema” que surge en el campo de la práctica profesional,
para después desarrollar, por medio de la conversación
interdisciplinar, la construcción del caso, generando hipótesis y
argumentos que puedan alumbrar y orientar nuestro trabajo con el
otro.
De
tal manera que podamos encontrar cierta brújula que nos permita
orientarnos en nuestro trabajo con las personas, más allá de la
espontaneidad con la que, en ocasiones, nos conducimos en
nuestra práctica cotidiana.
Comisión
de Marco Teórico
GIZARTE
HEZITZAILEAK ALDARRIKATU
Más que una metodología, se trata de una ética, un tratamiento cuidadoso. Cosme
ResponderEliminar