jueves, 26 de julio de 2012

HAY EDUCADORES QUE DESAFÍAN LAS PROFECÍAS DEL FRACASO.



En las disciplinas, como la nuestra, dedicadas a la atención a las personas nos conviene sostener el registro de una creencia.

        Creer que el otro pueda cambiar, pensar que las personas no están necesariamente abocadas a la repetición inconsolable de las mismas cosas.
       
        Saber que una persona puede hacer algo distinto, y que el destino mortífero puede quedar suspendido cuando se produce un buen encuentro con un educador que sea capaz de sostener ese lugar que permita al otro sustraerse de su propia fatalidad.

       Un cierto amor a la profesión que nos permita sostener el registro de una creencia en el cambio, en las posibilidades y elecciones particulares que se sustraen del encuentro con un otro. Ya que una de nuestras principales funciones, sino la fundamental, es precisamente aquello que se deriva de este encuentro particular, de la relación
 
     El buen educador debe ser capaz de apostar por el vínculo, acogiendo la particularidad de cada persona y sus invenciones particulares.

       Me consta que hay muchos educadores y educadoras que cada día desafían las profecías del fracaso (Graciela Frigerio). Educadores que confían en que sus actos puedan tener efectos en el tratamiento de las problemáticas emergentes y los malestares contemporáneos. 
 
        Es, pues, un buen momento para continuar sosteniendo un modelo de trabajo que apueste por un tratamiento cuidadoso de estas problemáticas. Un modelo que se centre en la persona, en la relación y en el vínculo.
                            


                                                                                          Cosme Aldarrikatu

3 comentarios:

  1. Fran a punto de vacaciones.26 de julio de 2012, 19:01

    Esto que nos cuentas es para mi, la asignatura principal de la profesion, sin ella, dedicate a otra cosa, no se puede estudiar, pero se puede descubrir. Espero que haya muchas educadoras y educadores que compartan esta vision. Gracias por recordarnoslo.

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  2. Con la practica diaria uno se va dando cuenta de esto, lo importante es la relación, la palabra del otro y su particularidad. Sería genial que muchos educadores y educadoras compartieran esta mirada sobre nuestro trabajo. Quizás esta pueda ser una de las lineas de trabajo de este colectivo, Aldarrikatu. Cosme

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  3. Cuántas veces decimos de broma cuando la semana va flojita, cuando las cosas no salen con los chavales... aiss si cobráramos por objetivos ésta semana 0 patatero!!!!!
    Éste es un trabajo que requiere paciencia y que nosotros sigamos fuertes en esa creencia de la que habláis, que sea nuestra brújula y nuestro norte, la confianza en que la persona puede cambiar su situación. Y que nosotros podemos guiarle en ese proceso..

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