miércoles, 6 de marzo de 2013

Hastío

Se deja caer en la silla derrotada. Sale de la cuarta o quinta entrevista del día, la octava de la semana, solo estamos a martes y ya está agotada.

Una vez más ha tenido que escuchar la misma historia a una familia con hijos, a una mujer sola.. me han suspendido la RGI y no se por qué.

-no has entregado un certificado de bienes de tu bebé de 8 meses...
-en Hacienda no hacen certificados a menores
-nosotros no tenemos la culpa
-resolución: denegada.

Las familias llevan meses esperando resoluciones que no llegan. Los papeles se "pierden" misteriosamente, "mejor que vuelvas a empezar con todos los papeles de nuevo, porque aquí no hay nada que hacer"

Día tras día, se dan contra el muro de la burocracia, burocracia inventada expresamente para saltarse la ley 18/2008, donde se regula
"el derecho a las prestaciones económicas y a los instrumentos orientados a prevenir el riesgo de exclusión, a paliar situaciones de exclusión personal, social  y laboral, y a facilitar la inclusión de quienes carezcan de los recursos personales, sociales o económicos suficientes para el ejercicio efectivo de los derechos sociales de ciudadanía."

Esa burocracia absurda que elimina el beneficio de la duda, ya que primero se corta la prestación y después se pregunta.

Se están creando enormes bolsas de pobreza en los barrios, a la vez que desde los medios de comunicación se siembra la semilla del odio, estigmatizando a todo el colectivo que percibe la renta de garantía de ingresos, publicando solo noticias negativas y censurando opiniones en los medios digitales, con el fin de que la ciudadanía asocie la prestación a delincuencia e inmigración, a jetas y caraduras que no quieren trabajar..

La realidad es que la RGI palia muchas situaciones de pobreza, pero, siendo un derecho recogido por la ley, los perceptores son criminalizados y tratados poco menos que como ganado en las instituciones públicas. En cualquier otro servicio de cualquier institución no se permitiría el trato que se dispensa a las personas, personas que por sus diversas situaciones y por no morder la mano que les da de comer (a ellos y a sus hijos) aguantan carros y carretas cada día en las oficinas de Lanbide.

"estoy destrozada de ver tanta gente en situación de pobreza extrema"

Se levanta y vuelve a su mesa, a por la siguiente entrevista, donde una persona le volverá a contar la misma historia,... y sabe que no puede hacer casi nada...

1 comentario:

  1. Educador de calle tocado moralmente. En proceso de cambio.8 de marzo de 2013, 7:48

    Estoy de acuerdo, yo tambien me siento asi, salir a la calle, acompañarles a la busqueda de la esperanza perdida, movilizarse junto a las iniciativas de las personas, participar en las movilizaciones ciudadanas, gestionar junto a ellos alternativas de ayuda comunitaria, mezclar la profesionalidad con nuestra ideologia y a partir de ahi, a ver que sale.
    Pelear desde nuestro puesto, haciendo llegar la realidad y enfrentandola a quien sea.
    A mi me ayuda, como profesional hacemos lo que podemos, seguro que lo mejoramos dia a dia, pero como ciudadano, vecino hare, posiblemente lo que me marque mi propia etica, cada una la suya, y aqui no hay fronteras, las que cada una se marque.
    A mi compañera me pasa lo mismo, no puedo y no acepto esta realidad, pero como te digo, me esta ayudando, o quizas compensando el hecho de sentirme parte de una comunidad que pelea "contra", pero tambien "a favor". Que no nos cambie la realidad. Complicado, muy complicado. Cansadas, muy cansadas. Animo y a tirar piedras!!!!!!.

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